Juventud, divino tesoro,
¡ya te vas para no volver!
Cuando quiero llorar, no lloro...
y a veces lloro sin querer...
EL Poeta Rubén Darío así decía.
No es el tema de los jóvenes, sino el tema de la juventud. Vista a la juventud como un estado del ser, mental y de actitud ante la vida.
Hemos visto una política pro-juventud por parte de la máxima autoridad de Rotary International, su presidente Ron Burton. Política no es de pronto el mejor término, digamos entonces ACTITUD y PRÉDICA. Tanto es así, que realizó una gira Mundial, haciéndose presente en Rosario-Argentina el mes pasado.
Esta actitud y prédica en pro de los jóvenes en Rotary, es el reconocimiento y la aceptación de que todo aquello que no cambia, se estanca y muere.
Lo extra;o de todo esto es......porque no leemos un poquito más a Paul Harris? Si mal no recuerdo en la primer década del Siglo XX dijo que Rotary debe estar preparado para cambiar cuantas veces lo haga el mundo y reinventarse una y otra vez.
Hemos visto como otras organizaciones, domadas por un exacerbado sentimiento de propiedad con sus instituciones, no reconocieron esta Verdad Universal, y hoy día se encuentran al borde de la extinción.
Rotary no es tuyo, ni mío, Rotary no es de Ron Burton ni del Gobernador de turno. Rotary es inconmensurable, es demasiado grande para ser propiedad de alguien. Rotary ya es una entidad que se alimenta de los valores de los rotarios, de los pensamientos y buenas acciones de estos, de sus modos de vida.
Lo que guardes y quieras retener nunca será tuyo, es una de las paradojas de la vida, sin embargo, cuanto compartas será tuyo por siempre.....tus pensamientos, tus palabras, tus acciones, especialmente tus resultados. Rotary es para compartir, nosotros somos conductores del mensaje de Rotary, y cuando compartimos nos llenamos aún más de él y nos beneficiamos.
Pero, cuando el socio pretende ser la voz de la experiencia, con autoritarismos, contrario a los valores, y por sobre todo, creyendo ser único guardián de la Verdad de Rotary. Es imposible no ver, detrás de sus palabras sus verdaderos motivos egoístas e interesados.
Es una Ley de los Sistemas, el sistema que tiene más flexibilidad, se adapta con mayor rapidez y flexibilidad al medio, resulta ser dominante. El sistema que se cierra en sí mismo, que no fluye y no es flexible, cae en la Entropía (deterioro, vejez, extinción).
Rotary está listo para recibir a los jóvenes, y será la última vez que indico, que cuando digo jóvenes me refiero a los que lo son en su edad y los que lo son mentalmente. Rotary está listo, y el momento es ahora.
No porque Rotary y los rotarios sean tan buenos de querer recibir a los jóvenes, sino porque el mundo así lo exige.
Es el mundo quien marca las pautas, y sinceramente, ya hay poco espacio para las reuniones semanales y cenas. En la Primer y Segunda Guerra Mundial los rotarios dejaron de reunirse, pero fue cuando mas trabajaron. No hay guerras mundiales, pero hay guerras silenciosas y hay necesidades urgentes, y solo los rotarios, poseídos por una vehemente sed de trabajo, acción, resultados, serán quienes cambien el mundo. De lo contrario.....el último que apague la luz.
Quienes no quieran aceptarlo, serán parte del olvido, porque Rotary ya es de los jóvenes, y arrasarán con la fuerza de los elementos, porque la Juventud es el Quinto Elemento que salvará y traerá Paz a esta tierra.
Es increíble la falta de creatividad para recaudar fondos de clubes ya establecidos y tradicionales, para aún más increíble es la capacidad que tienen de inventar y encontrar excusas para impedirle la participación a los jóvenes.
Aún más increíble es que el último recurso ha sido, el total abandono de los clubes de Rotaract e Interact.
Pero gracias a que el joven lleva en sí el espíritu de Prometeo (quién robó el fuego a los Dioses) es que han podido sobrellevar la decepción y aún así continúan trabajando por el bien de sus comunidades.
Finalizo con estas palabras de uno de mis mentores, el gran José Ingenieros, intelectual ítalo-argentino, contemporáneo de Paul Harris quien dice:
Toda juventud es inquieta. El impulso hacia lo mejor solo puede esperarse de ella: jamás de los enmohecidos y de los seniles, Y solo es juventud la sana e iluminada, la que mira al frente y no a la espalda; nunca los decrépitos de pocos años, prematuramente domesticados por la supersticiones del pasado; lo que en ellos parece primavera es tibieza otoñal, ilusión de aurora que es ya un apagamiento del crepúsculo. Solo hay juventud en los que trabajan con entusiasmo para el porvenir; por eso en los caracteres excelentes puede resistir sobre el apeñuscarse de los años.
Nada cabe esperar de los hombres que entran a la vida sin afiebrarse por algún ideal; a los que nunca fueron jóvenes, paréceles descarriado todo ensueño.
Y no se nace joven: hay que adquirir la juventud.
Y sin un ideal no se adquiere.
